Alguna vez se fijaron como las puertas automáticas levantan la autoestima... Uno va caminando re tranquilo, pensando en como va a hacer para pagar todo lo que está comprando, o si le va a servir, o donde lo va a meter y de repente, un gigante vidriado nos hace frente, pero nosotros seguimos, firmes, decididos a que nada nos va a hacer retroceder, no importa como, llegaremos a nuestro objetivo, nada, ni siquiera esta enorme puerta me va a impedir estallar la tarjeta de crédito, y seguimos y seguimos, resignándonos a nuestro destino, pero de pronto... lo vencemos, se rinde justo ahi a nuestros pies...y se abre...dejando pasar nuestro ego hacia el otro lado del
mundo....
mundo....
5 comentarios:
Mmmmh. No sé, a mí esas puertas me dan desconfianza. Es como si te estuvieran mirando... esperando el momento en que te arrimes, abrirse y en cuento estás por pasar, cerrarse de golpe quebrandote todas las costillas, dando inicio definitivamente a la tan temida revolución de las máquinas... Está en las escrituras!!! (de algún paranoico)
Mmm la verdad yo lo que hago es ir y volver cual niño pequeño para que se abran y se cierren jajajaja
No...a mi me ponen loca...son lennnnttttaaaasssssss
holis ,es la primera vez q me paso por tu blog ,lo conoci grazie a rosario3.com y la verda es q me parece muy lindo.Sigue asi
te invito a pasar por el mio sitienes ganas besos lola
También te facilitan el paso, como si te dijesen pasá que venís a gastar/pagar/invertir
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